Esta semana me ha tocado un trabajo de mantenimiento eléctrico y de alumbrado en el Palacio Conde Toreno, un lugar muy clásico y con un encanto único, que brilla con luz propia, ya que en él se celebran bodas y banquetes,
Pero como yo ya he pasado una vez por el altar, esta vez me tocó pasar de nuevo, para poner un poco más de luz, pero en este caso artificial.
Y además de dejar un buen alumbrado, hice un mantenimiento básico para dejar todo «como Dios manda» (No me digas que tú no pondrías estoy hoy porque no te creo), es decir puse la atención en lo que son, para mí, las funciones principales del mantenimiento.
Y son estas 3, para que no te líes.
- Mantener, reparar y revisar todos los equipos y servicios eléctricos para detectar posibles errores.
- Modificar, instalar y sustituar todos esos equipos eléctricos con desgastes por otros nuevos.
- Programar otra revisión cada cierto tiempo.
¿Por que es tan importante?
Porque te ahorra dinero en arreglos, un buen mantenimiento eléctrico te evita meterte en reparaciones profundas por falta de cuidados.
Es como un coche, si llevas años sin hacerle una revisión es probable que te vaya a dejar tirado algún día por algún fallo, aunque me digas que no sonaba raro, no tenías luces encendidas y no te daba ningún síntoma de rotura.
La luz tiene ese problema. Que no avisa, simplemente llega si no tienes un cuidado periódico de las instalaciones eléctricas.
Además, en este caso, hablamos de un lugar donde se celebran bodas y banquetes por lo que la seguridad eléctrica debe estar garantizada para no dejar teñido de oscuro un día con tanta luz.
Si tu tambien tienes un negocio y llevas tiempo sin darle una revisión profunda a tu local, ya sabes.
Dale al botón y quédate tranquilo, al menos con tu electricidad.
